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Category: Bartolomé Limón

Huelva

 1994

En València desde 2016

Bartolomé Limón es un artista multidisciplinar interesado por el universo psico-sexual-afectivo de hombres que mantienen sexo con otros hombres. A una edad muy temprana ya dibuja desnudos masculinos, siempre en pareja, en torno a una piscina, dejando ver su interés por los vínculos homosexuales. La cuestión marica vertebra su producción artística. Su principal objetivo es visibilizar estar realidades con tal de que lleguen a un público amplio y diverso, de una forma accesible y eficaz. De hecho, una de sus máximas es que su madre comprenda sus proyectos, sin ambages, con total claridad.

Limón, es una de esas mentes-esponja capaces de acumular conocimientos y más conocimientos. De palabra rápida e ingeniosa, se mueve con destreza entre los conceptos más complejos y los hits más relevantes de la cultura pop. Se forma en pintura en Bellas Artes, Universidad de Sevilla (2012-2016), espacio académico en el que aprende la técnica. En estos años, comienza una serie de cuadros explícitamente sexuales, pervirtiendo el canon clásico. Much+s profesor+s no entienden la propuesta, no obstante, otr+s, conscientes de la carga disruptiva y el interés por la disidencia sexual, le recomiendan que lea teoría queer. Momento en el que encuentra el camino que desea seguir. En 2015 visita la exposición individual de Louise Bourgeois, I Have Been to Hell and Back (Museo Picasso, Málaga). Al contemplar el pañuelo que da título a la muestra, confeccionado en 1996, se siente conmocionado. Su mensaje bordado, "I have been to Hell and back / And let me tell you, it was wonderful" (He estado en el Infierno y he vuelto / Y déjame decirte que fue maravilloso), supone un grito empoderado de lo desviado, lo erróneo, lo monstruoso. Esto le lleva a romper, de forma radical, con todo lo que le han enseñado en su formación universitaria, y a conectar con otras maneras de hacer, especialmente con la manualidad y los denominados trabajos femeninos, domésticos o menores. Poco a poco, introduce el hilo en el lienzo, hasta que el bordado se convierte en el color con el que pinta. Este salto intuitivo responde a una genealogía propia, ya que su madre es bordadora. Desde bien pequeño está acostumbrado a verla, durante horas, bordar. Este compartir los saberes colectivos de las mujeres contiene un gesto transgresor, quizás marica, y una carga política capaz de generar comunidad. Acercarse al bordado, desde la paciencia de la labor y la ejecución visual, ha cerrado una nueva vía de comunicación maternofilial, creando lazos y alianzas. De hecho, de forma habitual su madre le ayuda en sus proyectos.

Una vez finaliza el grado, se traslada a València para cursar el Máster de Producción Artística de la Universitat Politècnica de València. De este modo profundiza en la producción artística contemporánea y la teoría queer, permaneciendo cerca de referentes que han trabajado en torno a la sexualidad y la sexodivergencia, como Juan Vicente Aliaga, Pepe Miralles o Bea Higón.

Muy atraído por el trabajo de la teórica y feminista Gayle Rubin, vira su atención a las disidencias sexuales no aceptadas, como lo son la prostitución, el BDSM, las butchs o la pluma. En este sentido, su producción sirve como altavoz de estas experiencias, con el propósito de normalizarlas, transformando la carga negativa que el heteropatriarcado les ha atribuido. De ahí que su trabajo se convierta en una recopilación de signos y definiciones, para divulgar un conjunto de praxis sexuales no normativas.

Otra clave para comprender el trabajo de Bartolomé Limón es el modo en el que se fija en las paradojas que se producen en la era digital. Limón transforma la virtualidad de las pantallas en una obra que condensa tiempo y delicadeza, que rebosa cualidades hápticas y táctiles. Coser requiere mucho tiempo, supone un detenerse en un instante, tomando consciencia de cuáles son los caminos que ha de seguir la imagen, incorporándola física y mentalmente.


Archivo Queer de Artistas Visuales. València, 1975-2024.
joaquín artime