
Artista transdisciplinar y doctora en Arte. Trabaja en torno a la deconstrucción del género a través de modelos participativos abiertos y expansivos, e inicialmente a través de la canción. Uno de los motores que le impulsan a la creación artística es la necesidad de reivindicar otros cuerpos y otras realidades queers. Si nos centramos en primer lugar en el cuerpo, Bell Tornado muestra con desparpajo y sin pudor un cuerpo no normativo, visibilizando su corporalidad en un doble ejercicio que busca sensualizar, convertirse en sujeto sexy, a la vez que, con una mirada irónica, se muestra como un freak, ridiculizando toda productividad sexual. Si nos fijamos en segundo lugar en las realidades queers, cada vez que l+ artista se cambia de ropa está incidiendo en la idea de transformación como espacio de tránsito o espacio, sencillamente, trans. Precisamente, a Bell Tornado le preocupa el modo en el que las instituciones fagotizan algunas cuestiones queers, mientras l+s artist+s y person+s trans quedan fuera, al margen, no encajando en sus proyectos normativos y, por tanto, no siendo aceptadas. A ella le interesa el activismo trans, incidiendo en la marginalidad de sus identidades en combinación con la ecología.
En sus orígenes escribe. A principio de los 90 se inicia en la performance, muy atravesada por los ídolos pop, la pansexualidad y los espacios liminales. En 1999 en Londres, conoce a su pareja Anna Maria Staiano en el International Transgender Film and Video Festival de Alchemy Film Production.
Cuando llega a València crea un grupo de musical que fusiona el flamenco y el punk en un estilo que denomina flunk. Cabe referir que en inglés "flunk", además, significa no aprobar un examen. Aquí se manifiesta claramente su interés por lo fallido, abriendo la duda de si algo se ha hecho bien o no, o por el contrario está hecho para no estar bien hecho. Justo en este momento es cuando adopta Tornado como segundo apellido, en un guiño a Dolores Vargas La Terremoto. Este sobrenombre lo conservará desde entonces para diferenciarse del inventor del teléfono Graham Bell.
Muchas de sus presentaciones evocan el cabaret y su excéntrica mezcla de sexualidad, deseo, ironía, humor, música y política transgénero. En este contexto, la barrera entre performer y audiencia se difumina, como por ejemplo en OTV (1998), un proyecto artístico realizado por Chris Helson y Cath Whippey en el que se proyectan imágenes en directo en la calle principal de Castle Douglas (Escocia).
A lo largo de su trayectoria, ha trabajado en espacios como Chat´s Palace, The Royal Vauxhall Tavern y The Erotic Awards (Londres), Club Vegas (Ámsterdam), Madame Jasmine (Barcelona), Pepica la Pilona, Oximoron y el Festival Cabañal Íntim (València). En ocasiones, sus propuestas también se extienden a las pasarelas y los pasacalles surrealistas.
Bell Tornado empieza a trabajar sobre ecología queer en 2009, después de ver la pieza Dirty Sexecology, de Annie Sprinkle y Beth Stephens. De pronto, su artivismo encuentra el canal idóneo para abordar la ecología, el género y la diversidad sexual. Ante la crisis ecológica contemporánea, no le queda otro remedio que iniciar un duelo medioambiental. En 2011 cursa el Máster en Producción Artística de la Universitat Politècnica de València, profundizando en estas cuestiones, y organiza un ciclo de dos días con conferencias, talleres y performances a los que invita a otr+s artistas, activistas LGTBQ y transfeministas.
En este momento, se crea un alter ego performativo, el chamán transgénero Geyserbird. En numerosas culturas existe la creencia de que las personas transgénero poseen un don espiritual, quizás por combinar elementos masculinos y femeninos en su personalidad. Bell Tornado se pregunta qué ocurre con la espiritualidad y por qué carecemos de rituales en nuestros días. Como respuesta, inventa una figura que considera fundamental para la sociedad actual: el chamán-travesti-transmaricabollo, capaz de transformar los espacios que ocupa, como un+ sanador+ o curador+, que quiebra con su energía las estructuras obsoletas del poder y presenta una alternativa al dominio de la masculinidad y del monoteísmo. Este neo-chamanismo, como sus antecesores, se sitúa entre lo terrenal, lo celestial y lo espiritual, incorporando conceptos como la melancolía, la alegría, la locura o la celebración para generar comunidades transitorias y construir conexiones significativas.
Con Geyserbird ha realizado más de 50 rituales y ceremonias. Muchas de ellas quedan recogidas en su tesis doctoral Natural Hysteria: a Queer Response to Ecocide (Histeria natural: una respuesta queer al ecocidio, 2018, Universitat Politècnica de València). Para Bell Tornado, la idea del traje ritual es imprescindible, pues actúa como un canalizador que le facilita introducirse en el rol que va a desempeñar. En este caso, el traje de Geyserbird es confeccionado en colaboración con su pareja, Anna Maria Staiano, a partir de un sillón encontrado en su hogar en Xàtiva, La Erreria (House of Bent). Este nombre es el que adopta la pareja para firmar sus trabajos como colectivo.
En http://www.grahambelltornado.com/antitainment/various/ (consultado el 17 de febrero de 2023).
En http://www.grahambelltornado.com/queer-ecology/the-natural-hysteria-project/ (consultado el 8 de febrero de 2023).
En http://www.grahambelltornado.com/rituals/hysteric-ritual-how-to-heal-the-world-bank/ (consultado el 8 de ferero de 2023).
