Rampova se presenta (firmando como Anastasia Rampova):
Soy el fenómeno Polster-gay, no soy normal ni anormal, soy paranormal, por tanto no pierdan el tiempo ¡Oh doctos psicólogos y psiquiatras! en investigarme. A mí no me va la 'normalidad' sintética… confío en mis dotes histriónicas, porque genéticamente soy farandulera y biológicamente actriz. Hay que creer en la utopía porque la realidad ya es bastante increíble. ¿Qué hay que okupar una nave? Okupemos una nave espacial. Besos paranormales.
A lo largo de su vida tiene mil nombres y seudónimos, todas sus amigas acabarían por llamarla Rampo. El 1 de diciembre de 1978, en una carta, su amigo Carlos Javier Penaña le dice de manera muy acertada: “Yo creo que tus seudónimos son todo un ritual”. Rampova tiene mil nombres y pseudónimos: Francisco, Paco, Francesc, Oliver, Alla Nazimova, Shangai Lilí, Olga Baklánova, Katia, Katiuska, Katiova, Klitoriuska Bollerova, Putuska Vaginova, Madame de todas las Rusias, Rampowa, Eutanasia Rampova, Anastasia Rampova, Natacha Rampova, Nastàssia Rampova, N. Rampova Iván Ivanovich Ivanovna Grusenkaya Tortillof, Rampova Cabaret. Su nombre lo toma de la actriz, bailarina y directora de cine Natacha Rambova. En cuanto sale la película Rambo (1982), como no le gusta que la asocien con la violencia cisheteromasculina del personaje, cambia la b por la p de puta.
Mira, Alberto. (2020). Signos de vida: Recuperando la contracultura valenciana (1968-1990). En IVAM (Ed.) (2020), Contracultura. Resistencia, utopía y provocación en Valencia. Valencia, España: IVAM.
Gracias a la consulta del Archivo Rampova Kabarett en l'Armari de la memòria y a la Colección Santi Gregori.
Rampova se presenta (firmando como Anastasia Rampova):
Soy el fenómeno Polster-gay, no soy normal ni anormal, soy paranormal, por tanto no pierdan el tiempo ¡Oh doctos psicólogos y psiquiatras! en investigarme. A mí no me va la 'normalidad' sintética… confío en mis dotes histriónicas, porque genéticamente soy farandulera y biológicamente actriz. Hay que creer en la utopía porque la realidad ya es bastante increíble. ¿Qué hay que okupar una nave? Okupemos una nave espacial. Besos paranormales.
A lo largo de su vida tiene mil nombres y seudónimos, todas sus amigas acabarían por llamarla Rampo. El 1 de diciembre de 1978, en una carta, su amigo Carlos Javier Penaña le dice de manera muy acertada: “Yo creo que tus seudónimos son todo un ritual”. Rampova tiene mil nombres y pseudónimos: Francisco, Paco, Francesc, Oliver, Alla Nazimova, Shangai Lilí, Olga Baklánova, Katia, Katiuska, Katiova, Klitoriuska Bollerova, Putuska Vaginova, Madame de todas las Rusias, Rampowa, Eutanasia Rampova, Anastasia Rampova, Natacha Rampova, Nastàssia Rampova, N. Rampova Iván Ivanovich Ivanovna Grusenkaya Tortillof, Rampova Cabaret. Su nombre lo toma de la actriz, bailarina y directora de cine Natacha Rambova. En cuanto sale la película Rambo (1982), como no le gusta que la asocien con la violencia cisheteromasculina del personaje, cambia la b por la p de puta.
Mira, Alberto. (2020). Signos de vida: Recuperando la contracultura valenciana (1968-1990). En IVAM (Ed.) (2020), Contracultura. Resistencia, utopía y provocación en Valencia. Valencia, España: IVAM.
Gracias a la consulta del Archivo Rampova Kabarett en l'Armari de la memòria y a la Colección Santi Gregori.
